Santiago tiene rincones y experiencias pensadas para compartir de a dos. Desde paseos tranquilos en parques hasta cenas románticas o escapadas al valle del Maipo, la ciudad ofrece planes que combinan cultura, naturaleza y buen vino. Descubre qué hacer en pareja en Santiago en nuestro artículo.
Paseo en bote en el Parque Quinta Normal
El Parque Quinta Normal es uno de los espacios más tradicionales de Santiago y un panorama perfecto para parejas. Su laguna central permite arrendar botes y remar juntos mientras se disfruta del entorno natural. La experiencia tiene un aire romántico y relajado, especialmente en las tardes de verano. Además, el parque concentra museos como el de Historia Natural y el Ferroviario, lo que permite complementar el paseo con un toque cultural.
Cena íntima en un restaurante con terraza
Compartir una buena mesa es uno de los panoramas más clásicos en pareja. En Santiago abundan los restaurantes con terrazas acogedoras y patios interiores iluminados, especialmente en barrios como Lastarria y Bellavista, donde el ambiente bohemio se mezcla con una oferta gastronómica variada. Para quienes prefieren un estilo más sofisticado, Vitacura ofrece propuestas de autor con vistas a la ciudad y un servicio que hace sentir cada cena como una ocasión especial.
Relajo en las Termas de Colina
Escapar del ruido urbano hacia el Cajón del Maipo es siempre una buena idea, y hacerlo en pareja lo convierte en un plan inolvidable. Las Termas de Colina, rodeadas de montañas, ofrecen pozones naturales de aguas calientes en terrazas al aire libre. El contraste entre el agua tibia y el paisaje cordillerano genera un ambiente íntimo y único, ideal para desconectarse juntos y recargar energías.
Una parada especial: Viña Concha y Toro
Compartir una copa de vino en un entorno como el valle del Maipo es difícil de superar. La Viña Concha y Toro, en Pirque, cuenta con experiencias pensadas para hacer de la visita un momento memorable para dos.
La Experiencia Nocturna Casillero del Diablo + Cena es una de las más románticas: combina un recorrido guiado por las bodegas con una cena en un ambiente único. Otra opción es la Visita Guiada Premium Centro del Vino + Experiencia Icono La Gran Barra 1883, que mezcla historia y modernidad con una cata de vinos íconos en un espacio elegante. Y para quienes buscan algo más relajado, la Visita Guiada Premium Centro del Vino + Experiencia La Gran Barra ofrece ocho copas en un ambiente cercano, perfecto para descubrir sabores y compartir la experiencia de manera más lúdica.
Más allá de la cata, el paseo por los jardines y viñedos centenarios, con la cordillera de fondo, le da un aire romántico que convierte la visita en uno de los mejores panoramas de la ciudad para parejas.
Atardecer en el Cerro Manquehue
Para las parejas que disfrutan caminar juntas, subir el Cerro Manquehue es una experiencia que combina desafío, complicidad y recompensa. La ruta puede ser exigente, pero la vista desde la cima, con Santiago a los pies y los Andes al fondo, es uno de los atardeceres más memorables que ofrece la ciudad. Ver caer el sol desde ahí es un momento que invita a detenerse y disfrutar la compañía.
Rooftops con vistas a la ciudad
Si lo que buscas es terminar el día en un ambiente relajado, pero con estilo, los rooftops de Santiago son una gran alternativa. Con música, cócteles de autor y buena vista, se transforman en espacios ideales para conversar y brindar. Bares como Siete Negronis en Bellavista o terrazas en hoteles de Providencia y Vitacura ofrecen ambientes íntimos, perfectos para cerrar la jornada.
La capital chilena tiene todo para armar un plan en pareja: parques para pasear, restaurantes acogedores, termas en plena cordillera, viñas legendarias y vistas que se graban en la memoria. Ya sea en un día completo o en una salida espontánea, Santiago ofrece experiencias que se disfrutan mejor de a dos.




